Voy a empezar por describir mi estado actual. Tengo 33 años de edad, pero ese número me ha pegado de la patada. Digamos que estoy pasando por una especie de Crisis del cuarto de vida, ( al menos es algo trendy). Por estos días Internet es mi mejor amigo y me explica que muchas de las ansiedades y situaciones que experimento a diario son frecuentes y más comunes de lo que imagino. Estoy hablando en particular de depresión, trastorno de ansiedad generalizado, ira contenida, stress, sistema inmune enloquecido, dificultad para relacionarme en el ambiente familiar y social, fracaso profesional y económico, seguido de muchos etcéteras más.
Obviamente he probado muchas cosas para sentirme mejor. Asisto a terapia semanalmente hace casi un año, leo cuanto articulo de auto-ayuda encuentre a mi alcance, trato de cuidar mi alimentación, rutinas, sueño... Medito (o al menos hago el intento), voy a médicos y hago los tratamientos al pie de la letra, hago jugos verdes y cocino mis alimentos, cuando puedo... Me organizo para sacar tiempo para sacar tiempo en la agenda, para organizarme (...entiendes lo que digo). Estoy dando lo mejor de mí, después de haber tocado fondo hace ya algunos meses. Estoy en ese proceso de perdonarme, quererme, soltar creencias, olvidar rencores, vivir el presente, respirar a conciencia, tomarme mi tiempo. Pero al mismo tiempo, todos estas recetas de –¿Cómo vivir la vida que siempre has soñado? ¿Cómo el perdón afecta tu vida? "Bucket lists"- 100 cosas que todos debemos hacer antes de morir, sólo aumentan la presión. Quiero decir que ahora resulta según los consejos, que debo vivir tan intensamente, en este segundo, ahora, constantemente, que mi cuerpo vibre en un éxtasis de satisfacción y placer nunca antes experimentado; al mismo tiempo que una sabiduría tal, inunde mi mente de serenidad y calma, para no temer a la muerte, ni a la vejez, ni a la enfermedad. Pero que seguramente llegarán y son parte de la vida, que debo agradecer y ser feliz por ello, ser Zen pues, una monjita budista que tiene un negocio exitoso y es una ciudadana valiosa para la comunidad. Por favor! No puedo olvidar ser vegana, cuidar perritos, hacer voluntariado, ser sexy, un poco bohemia, asertiva, divertida, joven por siempre, políticamente correcta y dar "Like" como autómata en Facebook.
Sé que muchas de estas no son obligaciones, pero al mismo tiempo sé que son parte de esos sutiles códigos de cortesía que son necesarios para funcionar en la moderna telaraña social. La cual siempre ha existido y siempre existirá. No voy a mentir, siempre me ha costado mucho. Durante mi infancia fui muy retraída y mi carácter no es el mejor. Tengo un temperamento duro y mi forma de ver las cosas empeora todo el escenario. Tiendo a auto recriminarme por esto a menudo y cómo dice mi terapista, estoy sumida en un cicli de retroalimentación negativa que anda a mil por hora. Pero eso no hace que la realidad sea otra, tomar conciencia de esto no me permite borrar los aprendizajes y heridas que he acumulado con el tiempo, así como tampoco me permite recuperar el tiempo ni aprender magicamente a vivir en positivo de un día para otro. Pasar el "switch".
Switch es un interruptor, algo que de manera instantánea cambia algo, pero 33 años no se cambian en un día... Y para ser sincera muchas de mis maneras me gustan y estoy cómoda con ellas, al fin y al cabo, es quien soy y debo aprender a quererme, solo espero más bien hacer algunos ajustes que me permitan mejorar y refinarme. Seguramente esto traerá algo mejor a mi vida. Así que esto es lo que haré, usaré en su lugar un "dimmer" para regular la intensidad de frecuencia y le bajaré dos. Espero lograrlo por medio de una serie de ejercicios y proyectos y lo iré relatando con ayuda de fotos y la descripción de cada cosa. Por ahora aquí les dejo una foto del "Ahora" pero le pondrémos el "Antes" porque pronto habrá un "Después".
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